top of page
  • Facebook
  • Instagram
  • Spotify
  • Newsletter
BG_Blog_Interior.png

Viajar alimenta el alma, expande el corazón y te llena de magia


ree

Les quiero compartir lo importante que ha sido para mi siempre el viajar.

Creo que a la mayoría de los que hemos tenido la oportunidad de viajar sentimos algo similar al respecto. Cada vez que me embarco en un viaje (que por ahora no he podido hacer muchos) es una emoción increíble alrededor de viajar.

Siempre hay los nervios que creo que son normales ante un lugar nuevo o personas desconocidas, pero me encanta la magia que hace que cada viaje sea único y que se desarrolle de maneras inimaginables.

Desde que era pequeña me gustaba viajar, cuando mis papás me decían que iríamos a otra ciudad o lugar, con que fuera a media hora de camino, yo ya me ponía feliz y preparaba todo lo que necesitara llevar.

Algo que desde chica me gusta hace es escribir mientras viajo para poder recordar después lo que sentí al estar en esos lugares nuevos o conocidos, pero que siempre me mueven un poco.

Cuando un viaje implica subirse en un avión, me fascina estar sobre las nubes y pensar que todo aquello que me preocupa se ve tan pequeño desde tan arriba que me hace cuestionarme cosas más profundas cómo, ¿de dónde venimos? ¿qué hay más allá de todo lo que vemos con nuestros ojos?

Hay un sinfín de cosas que me encanta pensar mientras contemplo las nubes con formas mágicas durante el viaje (tengo miles de fotos de nubes de todo tipo).

Mi primera experiencia de viajar sola

Cuando viajé por primera vez completamente sola, bueno con un grupo de personas de un trabajo que tuve, pero sola en el sentido de ir sin familia ni nadie cercano a mí, fue una gran experiencia.

Recuerdo que en esa época descubrí el libro El poder del ahora, que alguien muy especial en ese entonces me había regalado como audiolibro, pero no había tenido el tiempo para escucharlo.

Mientras estaba viajando en tren (cosa que nunca había hecho de adulta) decidí ponerme los audífonos y escucharlo.

Me cambió la vida porque escuchar ese libro, que para mi es maravilloso, viendo paisajes increíbles, en un lugar donde todo es nuevo, fue una experiencia reveladora.

Posteriormente en el viaje tuve más tiempo para estar sola y, mientras recorría las calles de la hermosa ciudad de Ámsterdam, encontré una librería muy bonita dentro de una de esas típicas casas holandesas, toda de madera.

Mientras caminaba viendo y oliendo los libros, vi a una señora sentada en una banca leyendo un libro. Cuando me acerqué pude ver que era el mismo libro que yo venía escuchando en el tren: El poder del ahora.

Me impresioné por esta señal tan clara de sincronicidad. Cuando estás en el lugar y momento correcto, las cosas fluyen.

Le pregunté dónde podía encontrar ese libro, me contó que lo ha leído miles de veces y que es su libro favorito, Así conocí a una persona increíble que dejó una marca en mí para siempre.

Encontré otros libros del mismo autor, los compré y me fui feliz por vivir una experiencia mágica en un lugar mágico.

En casi todos mis viajes, cuando los disfruto, suelto y fluyo, me pasan cosas así de mágicas y, ¡me encanta!

Las sincronicidades no se hacen esperar

Me encantaría poder fluir de esa manera constantemente, y por ello trabajo para soltar y fluir todo el tiempo, pero cuando viajo siento que las energías se mueven para que se me revelen ciertas cosas.

Por eso cada viaje que he hecho me llena un cachito de alma, me hace sentir viva y que quiero avanzar más y más en este camino que llamamos vida.

El poder estar en nuevos lugares es mi mayor fascinación, disfruto de esa incertidumbre para luego descubrir algo que ni existía en mi cerebro, como imágenes, colores, sabores, olores, personas, en fin, experiencias nuevas.

Siento que, al tener este tipo de experiencias nuevas, el alma se expande un poquito más, entendemos un poquito más de otros, del todo, del mundo y del Universo.

Espero que pronto podamos viajar de nuevo para seguir llenando nuestras almas con estas experiencias expansivas.

Comentarios


bottom of page